Ford anuncia un ERE en Almusafes y la apertura de consultas con los sindicatos
La dirección de Ford España ha comunicado este viernes a los sindicatos su intención de abrir un periodo de consultas para aplicar un nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) en la fábrica de Almussafes (Valencia). Por ello, la empresa ha instado a los representantes de los trabajadores a formar una comisión negociadora en un plazo de siete días.
En abril de este año está previsto el cese de la fabricación de los modelos S-Max y Galaxy porque la multinacional está acelerando su estrategia hacia la electrificación total de sus vehículos de pasajeros en 2030 y de todo su portfolio en 2035. La factoría de Almussafes se quedará pronto con la producción solo del Kuga, el de mayor peso actualmente, hasta la fabricación de los nuevos eléctricos.
Aunque la fábrica de Almussafes fue la elegida para producir los vehículos eléctricos de Ford en Europa, una decisión que aseguró la carga de trabajo en los próximos años, la empresa ya había avanzado en más de una ocasión que la transformación de la producción supondría redimensionar la plantilla porque la fabricación de vehículos eléctricos requiere menos mano de obra.
UGT, el sindicato mayoritario en la planta valenciana, ya avanzaba hace unas semanas que veía «más que probable que durante la primavera de este año» comenzaran las negociaciones para abordar la situación de la plantilla de Almussafes, según explicó el secretario general del Comité de Empresa y portavoz de UGT en Ford Almussafes, José Luis Parra.
El director de fabricación de Ford, Dionisio Campos, señaló el pasado octubre que el vehículo eléctrico había que «redimensionar» la plantilla y que la empresa se iba a sentar «a hablar con los sindicatos para ver qué alternativas» hay para «realizar esta redimensión» de una forma «llevadera».
Además, a estas circunstancias se sumó el anuncio de Ford de despedir a 3.800 empleados en Europa -2.300 son trabajadores en Alemania, 1.300 en Reino Unido y 200 en el resto de Europa-, una primera tanda de despidos que no había afectado a Almussafes pero que la fábrica valenciana contempló con «preocupación», según los sindicatos.
Por otro lado, la fábrica valenciana lleva encadenando diferentes ERTE desde 2020 y prorrogó el último expediente hasta el próximo 30 de junio debido a la inestabilidad en el suministro de semiconductores y componentes derivados. Estos expedientes afectan potencialmente, de manera total o parcial, a toda la plantilla. Durante estas paradas de producción, los trabajadores perciben un 80% de su salario y el 100% de las pagas, preservando antigüedad y vacaciones.